El subsecretario de Infraestructura del Plan Belgrano, el radical Ricardo Ascárate, efectuó un análisis de las obras requeridas por el Gobierno provincial a la Nación para la reconstrucción de las localidades del sur, y planteó dudas con respecto a varios de los proyectos elevados por los técnicos locales. Según el ingeniero -que integra el equipo del funcionario José Cano (UCR-Cambiemos)-, la Provincia le adeuda a la Nación rendiciones por más de $ 23 millones.
“A principios de 2015, se enviaron a Tucumán fondos por $ 28,7 millones para ejecutar obras, principalmente en las zonas de Alberdi, La Cocha y Graneros”, indicó Ascárate en un informe que entregó a LA GACETA. Añadió que entre las inversiones incluidas en aquellos programas figuraban “las reconstrucciones en los canales Los Pizarro y San Ignacio y (diversas) rectificaciones de cauce del río Marapa”. “De los recursos remitidos por la Nación, sólo se ejecutaron obras por $ 4,9 millones. Y no existe rendición de cuentas por más de $ 23 millones, que la Provincia intenta justificar con el argumento de que ‘no se pudieron realizar las obras por las lluvias’, desde mayo de 2015 a la fecha”, indicó el funcionario del Plan Belgrano.
Ascárate objetó además al gobierno de Juan Manzur por la interpretación que efectuó de la ley de adhesión al Sistema Nacional de Gestión Integral del Riesgo (Sinagir), un programa federal creado para tareas de emergencia y de reconstrucción en zonas afectadas por catástrofe. “Es extraordinario que algunas de esas obras (no concretadas) se hayan incorporado a los pedidos de emergencia a Sinagir, tanto en las de la Dirección Provincial del Agua (DPA) como en las de la Secretaría de Recursos Hídricos de la Provincia”, indicó.
Ascárate difundió estos datos en una semana que comenzó con tensos cruces entre funcionarios de la Nación y de la Provincia. En principio, Cano había manifestado dudas con respecto a los 75 proyectos de obras, valuadas en unos $ 1.350 millones, que había requerido el PE a la Casa Rosada. El martes, el vicegobernador Osvaldo Jaldo salió al cruce del referente radical. “Si hay que hablar de dudas, la mayor duda del país es el Plan Belgrano”, replicó el peronista.
Ayer, Ascárate apuntó a respaldar los argumentos de Cano con un informe de situación. “Recibimos pedidos de la Dirección Provincial del Agua por algo más de $ 234 millones. Sólo hay unos $ 60 millones que tienen relación con la protección de La Madrid y las zonas que sufrieron inundaciones. Y no hay ningún proyecto para solucionar el origen de los problemas: los ríos San Francisco, Ovanta y Palancho”, redactó el subsecretario de Infraestructura del Plan Belgrano. También cuestionó los requerimientos habitacionales efectuados por la Provincia. “Este dato también es insólito: se piden más de 140 viviendas, y ninguna en la zona de afectación. La mayoría (serían) en Alberdi y Aguilares, cuando se requieren, mínimo, más de 110 viviendas para trasladar la zona más grave de La Madrid y crear un sistema de protección al oeste de esa localidad”, añadió.
Ascárate rescató que los “pedidos del Sepapys fueron correctamente presentados, con proyectos por más de $ 19 millones para recuperar el abastecimiento de agua”. Pero consignó otras supuestas fallas en las solicitudes elevadas por la Provincia. “Los únicos que no se dan cuenta de la gravedad de lo que ocurre son algunos que vienen (ejerciendo cargos públicos) en los últimos 12 años de gestión y se han acostumbrado a la emergencia; es decir, salir siempre a paliar las consecuencias, pero nunca a remediar las causas (de las inundaciones)”, apuntó el funcionario del Plan Belgrano.